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| Cim Huéscar, ejemplo de buen funcionamiento |
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Corría el año 1997 cuando el ayuntamiento de Huéscar inició la aplicación de las políticas de igualdad de género con la creación del Centro Municipal de Información a la Mujer, al frente del cual destinó tres técnicas responsables de los departamentos de Información /dinamización - participación social, Empleo y Asesoramiento Jurídico; en la actualidad, contando con los fondos del Ministerio, a través de la aportación económica del Pacto de Estado, cuentan con una psicóloga para atención individual y colectiva.
Desde ese momento, el trabajo en materia de Igualdad del consistorio oscense ha llevado que ponga en marcha dos Planes de Igualdad, medidas que se trabajan transversalmente desde todas las áreas municipales, además de crear la I Escuela Permanente Municipal de Formación en Igualdad, puesta en marcha en el año 2012, financiada por el Grupo de Desarrollo Rural y desde la que se ofrece formación de calidad para la población oscense y comarcas vecinas todos los años, manteniendo convenios con la Universidad de Granada para dicha formación.
El Ayuntamiento de Huéscar ejecuta un trabajo directo a través del Centro de la Mujer con las asociaciones de mujeres, los centros educativos -realizando un apoyo técnico a profesionales del ámbito educativo, desde la intervención en las aulas con el alumnado, el fomento de las AMPAS en temas de igualdad de género, el asesoramiento técnico en proyectos coeducativos y la participación en los Consejos Escolares y Comisión de Igualdad- Centro de Salud, Servicios Sociales, Policía Local y otras entidades del municipio para iniciar proyectos donde la perspectiva de género esté presente.
La prevención de la violencia de género es sin duda la mayor preocupación dentro de estas políticas de Igualdad. Para ella, cuentan con la Comisión Local de seguimiento del Protocolo de coordinación de entidades en la atención a mujeres víctimas de violencia de género, funcionando ininterrumpidamente desde el año 2001.
Todas estas acciones están dando resultado, ya que la incorporación de la mujer oscense a la vida social, política y económica del municipio, se va consiguiendo.
El CIM de Huéscar es ejemplo de buen funcionamiento. Entre sus objetivos principales están la objetividad y profesionalidad de las técnicas que trabajan en él. La atención directa a las usuarias es personalizada respetando siempre los ritmos de cada una de las mujeres que atienden.
Las intervenciones grupales se enmarcan siempre en un argumento común, la búsqueda de la igualdad real entre mujeres y hombres.
Como aseguran desde el Centro Municipal de la Mujer de Huéscar “trabajar por y para las mujeres de nuestro municipio es nuestro día a día, rentabilizando los recursos y acercando los mismos a las mujeres de nuestra zona”.
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